El Museo de Bellas Artes de Corrientes Dr. Juan Ramón Vidal cuenta entre las piezas que componen su patrimonio, con una misteriosa e intrigante pintura del reconocido artista Benjamín Solari Parravicini, quien ha cobrado fama mundial también como vidente, al punto de ser llamado: «El Nostradamus Argentino».

A Benjamín Solari Parravicini se le atribuye haber predicho mediante sus famosas «psicografías» algunos eventos históricos tan destacados como: La dictadura de Fidel Castro en Cuba, El atentado a las Torres Gemelas, la elección del Papa argentino, incluso la pandemia del Coronavirus (ver nota sobre sus más famosas predicciones).

La obra que posee el Museo de Bellas Artes ha sido llamada: «El Circo se va», y se trata de un óleo sobre madera de 112 x 99 cm., donación del mismo artista, quien realizara algunos trabajos en nuestra ciudad.

Benjamín Solari Parravicini
Benjamín Solari Parravicini pertenece, por parte de su padre, a la reconocida familia correntina Solari, entre los que se destacan su abuelo Justino Solari a cuyo nombre se debe la Estación Solari (Mariano I. Loza) y su primo Delio J. Martínez Solari quien fuera Presidente de la Cámara de Diputados de Corrientes (Créditos: Diario El Libertador).

Descripción de la Obra de Solari Parravicini «El Circo se va» a cargo del Dr. Fernando Vargas Gómez

«La figura monumental de una persona andrógina ocupa el centro de la escena. La ambientación contagia una sensación de hastío y agobio; luego de finalizada la función la vida retoma su rutina.

¿Es verdaderamente así? El payaso asexuado desplomado en asiento se apoya en un destartalado paraguas. Todos los elementos parecen desproporcionados, su maletín y zapatos, y su colorido disfraz. Aún el maquillaje y atuendo desprolijo muestra la exageración de las formas y del talle.

Luego de haber cumplido su misión de hacer reír y llorar, el hombre de máscara reposa y pierde la mirada en el vacío. Seguramente vaga con la visión espiritual que lo transporta al interior atemporal de sí mismo y a la inevitable comparación de ambos mundos.

Los objetos reducen la atención simbólica, el viejo reloj y el espejo, uno igualando las realidades humanas y el otro devolviendo iguales vanidades. Nada es lo que parece, la interpretación sutil impone la humildad que muestra el payaso que espera partir.

Vemos una mascarada, una ilusión de la realidad fragmentada y detenida en el fugaz instante que eligió el artista para mostrarnos el revés de otras cosas.

¿Acaso no supone una contradicción conceptual descubrir la tristeza del solitario bufón y reconocer su pasividad?

A mí me parece que en esta obra Benjamín Solari Parravicini expone sus dudas y afirma sus convicciones humanistas a través de las especulaciones metafísicas que comento.»

Un misterio sobre otro

Hace algunos años la obra «El Circo se va», que ha sido parte de numerosas exposiciones en sus salas y declarada «obra destacada» por parte del Museo de Bellas Artes, fue restaurada para preservarla de los efectos del paso del tiempo.

En ese contexto, Elisa Martínez, la profesional que estuvo a cargo de las tareas de restauración de la obra, comentó recientemente a Museos de Corrientes que al iniciar sus trabajos en la pintura se llevó una sorpresa inusual.

«Curiosamente, en el reverso de la misma, se halla otro payaso, con técnica y características diferentes. Evidentemente, este boceto o proyecto de obra, nunca pasó de esta etapa. Sin lugar a dudas, es sumamente interesante la obra de Benjamín Solari Parravicini», subrayó la especialista.

Ese dato aporta aún más misterio a esta obra producida por un artista fascinante como lo es Benjamín Solari Parravicini, ya que surge la duda de si el segundo payaso es sólo un boceto inconcluso o si fue puesto allí de manera intencional y esconde tras de sí algún significado cuya interpretación haya querido reservar el artista, quizás, a los pocos que sepan de su existencia.

El Circo se va Benjamin Solari Parravicini Corrientes
Pintura: «El Circo se va». Benjamín Solari Parravicini. Óleo sobre madera de 112 x 99 cm.

el circo se va imagen
Curiosa imagen encontrada por la restauradora Elisa Martínez al dorso de la pintura original. Se trata de otro payaso que también está apoyándose sobre un paraguas pero con diferente técnica artística. Muy pocas personas han visto este lado de la obra en cuestión de Benjamín Solari Parravicini.

Imágenes de la restauración de la obra a cargo de Elisa Martínez y de los manuscritos que confirman la donación